Los mercados ante el escenario de una nueva guerra

El proceso del avance militar contra Libia ya está en marcha. Un nuevo desafío para la estabilidad global y la seguridad del continente africano toma lugar. Mayor incertidumbre en el corto plazo parece ser lo que sobrevendrá. ¿Cómo reaccionarán los mercados ante estos episodios?.

La guerra no es una situación agradable desde ningún punto de vista (social, económico, político, etc). De todas formas, desde el punto de vista estrictamente económico y financiero, los acontecimientos de corto plazo marcarán la tendencia de los mercados financieros. Una ágil respuesta que derive en la solución del conflicto permitirá descomprimir la tensión y la incertidumbre entre los inversores, permitiendo, quizás, retomar una tendencia alcista en un escenario de mayor previsibilidad. Sin embargo, cabe la posibilidad de que el conflicto se prolongue más de lo estimado inicialmente y ello conlleve a mayor volatilidad.

El terremoto, tsunami y la contaminación nuclear en Japón (aparentemente ya más controlada) habían agregado mayor incertidumbre al escenario internacional. El conflicto en Medio Oriente ya había detonado con anterioridad, profundizándose en los últimos días.

¿Cuál será el panorama en el corto plazo?. Seguramente tendremos un mercado lateral, sin tendencia definida, a medida que van llegando las novedades en torno a los frentes de conflicto que dominan la agenda de corto plazo. De todas formas, los fundamentos de la economía global en el mediano plazo siguen mostrando una recuperación del mundo desarrollado que se acopla al crecimiento del mundo emergente. Esto permite mantener la perspectiva positiva en un horizonte superior a los seis a doce meses.

El precio de los granos, impulsado por las rebajas en las proyecciones de cosecha

A partir del informe mensual del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), los precios de los granos volvieron a recobrar protagonismo y treparon fuertemente en la jornada de ayer por las débiles proyecciones presentadas por el organismo.
 
En el caso del trigo, la USDA informó que los inventarios 2010/2011 en los Estados Unidos disminuirán 40 millones de búshels como consecuencia de las mayores exportaciones, lo que tuvo una repercusión inmediata en el precio del cereal, que ganó casi 2% en la jornada de ayer. De todas formas, el organismo estadounidense señaló que la oferta global creerá levemente por encima de las estimaciones por mejoras en los inventarios y por las proyecciones de cosecha en la Argentina.
Por su parte, la USDA revisó a la baja la producción local de maíz hasta los 93 millones de toneladas. La reducción en la proyección de cosecha llevó a los precios en el mercado de Chicago hacia una subida de más del 3%. También fueron revisados a la baja los inventarios finales del cereal para el fin de la actual campaña.
En el caso de las oleaginosas, más precisamente la soja, la producción también fue revisada a la baja en 46 millones de búshels por la menor cosecha y el menor rendimiento por hectárea. De esta manera, la cosecha total se estima en 3.329 billones de búshels. El precio de la soja también reflejó el efecto positivo de la menor oferta disponible y ganó en Chicago cerca del 4%
.
Estas estimaciones no hacen más que confirmar que los factores climáticos incidirán plenamente en la oferta de granos a nivel mundial, situación que presionará de manera creciente a los precios, en una economía global donde la demanda tiende a recuperarse y las presiones inflacionarias comienzan a sentirse en aquellos países donde la economía ha crecido más rápidamente.
En el corto plazo, se mantendrá la volatilidad, lógica dentro de las alteraciones propias de los mercados que se mueven al ritmo de las noticias que surjan en relación con la crisis financiera en Europa y los datos de actividad de la economía estadounidense.
Para el largo plazo, el crecimiento superior de la demanda de granos y alimentos respecto a la oferta tenderá a sostener y hasta empujar al alza los actuales niveles de precios internacionales.

Gustavo Neffa – “Cómo armar una estrategia para invertir en sectores defensivos en los EE.UU.”

Cuando llega el momento de cubrirse, las alternativas que tienen los inversores son diversas. Las estrategias frente a una lateralización o baja del mercado van desde la venta de las posiciones, su cobertura con derivados a través de la compra de puts, o bien shortear directamente al mercado y posicionarse a la baja con el ánimo de ganar dinero si retroceden. Otra posibilidad es en rotar el portafolio en función de los sectores.
El S&P500 cotiza con un múltiplo precio-a-ganancias por acción de 16 veces las ganancias de los últimos 12 meses, aproximadamente su promedio histórico. Pero los inversores miran hacia delante, siempre, por lo que si se proyectan los beneficios crecientes éste se reduce a 14. Pero no todos los rubros son tan atractivos.

El índice presenta nueve subíndices en los cuales se pueden operar indirectamente a través de los siguientes ETFs:
 

ETFs de sectores de los EE.UU.: evolución al 29 de diciembre de 2010
Los ETFs sectoriales han tenido un recorrido diferente: las empresas industriales y de bienes de consumo discrecional fueron las de mejor desempeño en 2010, y las de electricidad (utilities) y salud (health care) las de menor performance.

Luego de la fuerte subida de los índices y de los sectores más volátiles a los cambios económicos, los más astutos, que tienen que seguir invertidos, toman decisiones importantes y reducen la exposición en algunos rubros y los incrementan en otros.

En la figura de más abajo encontrarán la evolución de los sectores que más se destacan a lo largo de la vida de un ciclo de mercado. Los años 2009 y 2010 fueron de libro de texto, ya que las empresas de sectores cíclicos adelantados fueron las primeras en recuperarse (consumo discrecional y tecnológicas), seguidas de las cíclicas tardías (materiales e industriales), mientras que el S&P500 tuvo un desarrollo promedio anual del 13% hasta el 29 de diciembre:
Ciclo de mercado para el S&P 500 (alza y posterior baja): sectores destacados (outperformance).
En lo que respecta a 2011, el mercado accionario podría realizar una transición de un rally de alto vuelo impulsado por sectores cíclicos adelantados y, en menor medida, por los tardíos, hacia una fase de crecimiento menos dinámica liderada por cíclicos tardíos pero, especialmente, por los contracíclicos (la parte de la derecha del gráfico).
Lo que se debería hacer, si se quiere tornar más conservador, es migrar la cartera de acciones de consumo discrecional, financieras y tecnológicas hacia empresas de salud, consumo no discrecional, utilities y telecomunicaciones
Los Hedge Funds que apuntan a estrategias de baja volatilidad están comprando papeles de compañías de consumo no discrecional y vendiendo en descubierto las de consumo discrecional. 

En momentos de elevada volatilidad, la estrategia consiste en posicionarse en empresas de alta calidad de consumo no discrecional, utilities y telecomunicaciones. Si se espera un fuerte recrudecimiento del riesgo sistémico, hay que estar preparado.
También, resta una fase de transición en la que las compañías del sector industrial deberían andar bien. Pero, antes es imperioso analizar cómo las puede afectar este nuevo tipo de cambio (dólar fuerte vs. euro débil), que debería seguir unos cuantos trimestres más.
Si se analizan las diferencias entre el índice S&P500 y el Russell 2000, se ve que el segundo tiene un mayor porcentaje (16%) de empresas de consumo discrecional, de las que ya se apreciaron bastante en la fase inicial de esta recuperación que lleva más de un año, superior a la del primero (10%). Además, cuenta con un menor porcentaje (3%) de firmas contracíclicas de consumo no discrecional que el otro (11%).
S&P 500 vs. Russel 2000: comparación de capitalización bursátil por sectores (en % del total)
De incrementarse la aversión al riesgo, se debería dar un mayor retroceso en el Russell 2000 en relación al S&P 500, que resulta más defensivo por la naturaleza de su composición.
En total, el S&P 500 posee un 29% de sectores defensivos y un 26% de sensibles a las tasas de interés, que es fundamental a tener en cuenta además cuando la autoridad monetaria vuelva a subir los tipos, algo que debería darse en 2012 en los EE.UU.
Los inversores hacen este tipo de análisis en forma continua para los distintos índices en los cuales se encuentran posicionados. Pueden replicarlos con su cartera frente a una coyuntura que lo lleve a tornarse más conservador, o bien, por el contrario, seguir convalidando nuevas subidas que justifiquen seguir posicionado en los sectores ganadores desde 2009.

Comienza la temporada de balances corporativos en USA

Este lunes comienza oficialmente la temporada de balances corporativos correspondientes al 4T10 en los Estados Unidos. Las expectativas son altamente optimistas y lo que falta es que dichas expectativas se consoliden con los datos de la realidad.
Alcoa será la primera compañía en abrir la temporada, lo que ya es una costumbre. Para el 4T10 se espera una ganancia de u$s 0,19 por acción, sensiblemente superior a los u$s 0,10 obtenidos en el 4T09. Después seguirá durante las próximas cuatro semanas las presentaciones de balances de las empresas más importantes que cotizan en Wall Street.
La incógnita por develar es si los balances corporativos podrán contrarrestar los efectos negativos que provienen desde Europa y que mantienen en una posición de debilidad del euro, que cotiza por debajo de u$s 1,30.
De acuerdo a los datos de los indicadores económicos del 4T10 de la economía estadounidense, las perspectivas son altamente favorables para que las compañías presenten cifras más sólidas que en trimestres anteriores. ¿El mercado descontó esta situación o puede servir como combustible para una nuevo rally de los índices?.
Particularmente creo que el panorama estará marcado por la selectividad. Sectores más expuestos a la economía estadounidense pueden sacar provecho de la ligera mejora de la economía de los últimos meses mientras que aquellas compañías que están más expuestas a la dinámica del crecimiento global, sobre todo en Europa, pueden mostrar algunos signos de debilidad. Sin embargo, el fuerte crecimiento de las economías emergentes puede mitigar, sin dudas, este efecto.
El lunes se larga la carrera y los inversores deberán permanecer atentos a las novedades que van llegando desde el mercado para evitar quedar retrasados y poder llegar a la meta con la mayor performance posible de sus portafolios de inversión.

Warren Buffett lo hizo nuevamente

Si uno es un apasionado de los mercados, entonces Warren Buffett no puede dejar de ser una referencia importante a la hora de hacer negocios. El legendario inversor norteamericano es una de las claras muestras de que no solo se necesita suerte para poder obtener rendimientos mayores a los del mercado sino que también debe ser acompañada con paciencia, sentido común y criterio, además de no tomar deuda para realizar sus inversiones.
Después de un año 2009 donde los mercados lograron revertir las pérdidas causadas en el 2008 por la crisis subprime, pero la empresa de Warren Buffett, Berkshire Hathaway (BRK-A), no logró rendir más que el índice S&P 500 (2,7% vs 23,5%), el 2010 fue un tiempo de revancha para el inversor ya que su compañía terminó el año con una suba de 21,4% contra el 12,8% que rindió el índice Standard & Poor’s 500 en el mismo período de tiempo considerado.


Si uno verifica el cuadro adjunto, puede observar que con la paciencia necesaria y con una visión de mediano ó largo plazo, la inversión en la empresa de Warren Buffett ha sido muy rentable para los inversores que apostaron a ella: 



  Berkshire Hathaway Stock vs. S&P 500 Index
  Annual Gains
Year BRK.A Close BRK Pct. Change S&P Close S&P Pct. Change
2010 120,450 +21.4% 1257.64 +12.8%
2009 99,200 +2.7% 1115.10 +23.5%
2008 96,600 -31.8% 903.25 -38.5%
2007 141,600 +28.7% 1468.36 +3.5%
2006 109,990 +24.1% 1418.30 +13.6%
2005 88,620 +0.8% 1248.29 +3.0%
2004 87,900 +4.3% 1211.92 +9.0%
2003 84,250 +15.8% 1111.92 +26.4%
2002 72,750 -3.8% 879.82 -23.4%
2001 75,600 +6.5% 1148.08 -13.0%
2000 71,000 +26.6% 1320.28 -10.1%
1999 56,100 -19.9% 1469.25 +19.5%
1998 70,000 +52.2% 1229.23 +26.7%
1997 46,000 +34.9% 970.43 +31.0%
1996 34,100 +6.2% 740.74 +20.3%
1995 32,100 +57.4% 615.93 +34.1%
1994 20,400 +25.0% 459.27 -1.5%
1993 16,325 +38.9% 466.45 +7.1%
1992 11,750 +29.8% 435.71 +4.5%
1991 9,050 +35.6% 417.09 +26.3%
1990 6,675 -23.1% 330.22 -5.8%
1989 8,675 +84.6% 350.67 +26.3%
1988 4,700 +59.3% 277.72 +12.4%
1987 2,950 +4.6% 247.08 +2.0%
1986 2,820 +14.2% 242.17 +14.6%
1985 2,470 +93.7% 211.28 +26.3%
1984 1,275 -2.7% 167.24 +1.4%
1983 1,310 +69.0% 164.93 +17.3%
1982 775 +38.4% 140.64 +14.8%
1981 560 +31.8% 122.55 -9.7%
1980 425 +32.8% 135.76 +25.8%
1979 320 +110.5% 107.94 +12.3%
1978 152 +10.1% 96.11 +1.1%
1977 138 +55.1% 95.10 -11.5%
Average +27.5% +8.9%



Del cuadro anterior se desprenden dos grandes conclusiones: la primera es que en el largo plazo, invertir en acciones permite, no solo mantener el poder adquisitivo del dinero, si uno considera la inflación promedio anual en los Estados Unidos y el rendimiento promedio del S&P 500 de 8,9% de los últimos 33 años, sino también generar valor agregado en el monto invertido.


La segunda gran conclusión es que en el mediano y largo plazo es posible ganarle al  índice de referencia si uno invierte en una compañía con sólidos fundamentos y con una estrategia de negocios sustentable en el tiempo.



Los commodities rompen resistencias e impulsan la inflación

Los commodities no estuvieron ajenos a la suba de los mercados bursátiles durante los últimos doce meses y tuvieron su escalada alcista. Muchos de ellos han roto resistencias técnicas importantes y se encaminan hacia nuevos precios récord. ¿Qué implicancia tiene esto para las expectativas en el 2011?.
El primer y más claro efecto es la presión inflacionaria que está ejerciendo la suba de los commodities en aquellas economías que han logrado sortear la crisis financiera de la mejor manera y que han gozado de un crecimiento saludable durante todo el año 2010. En estos dos conceptos básicamente están abarcadas la gran mayoría de las economías emergentes, lideradas por China, Brasil e India.
En tanto, las economías desarrolladas están más preocupadas por reconstruir sus economías tras la crisis que en un posible efecto inflacionario provocado por la mayor demanda ó la suba de los commodities. Es por eso que en estos días hemos visto el anuncio de nuevos paquetes de ayuda financiera para las economías más delicadas, lo que implica más emisión monetaria. Esta situación podría, eventualmente, retroalimentar el efecto inflacionario de recuperarse la demanda antes de lo previsto.
Este no parece ser caso y nuevamente las proyecciones apuntan a que las economías emergentes guíen el crecimiento global. La gran incógnita es qué pasará si la inflación, principalmente, se acelera en el rubro alimentos y fuerzan a muchos gobiernos a adoptar medidas restrictivas para frenar la demanda y provocar una caída en los precios de los commodities. China, la economía más dinámica del momento, señaló que busca un crecimiento económico más moderado y eso podría implica sacar el pie del acelerador en el corto plazo. Eso repercutiría principalmente en los precios de los commodities, forzando una presión bajista.
Sin embargo lo que se observa en la realidad es que los precios de los commodities no solo muestran una tendencia de fondo alcista por cuestiones de demanda, sino que también las limitaciones de la oferta pueden apuntar en el mismo sentido.
Los factores climáticos, los posibles enfrentamientos bélicos y las dificultades en los procesos productivos podrían alterar la oferta tanto de los granos como de los soft commodities.
En principio, no deberíamos esperar un rally alcista de gran magnitud en el corto plazo, aunque una salida de la crisis mejor a lo esperado por parte del mundo desarrollado y la continuidad de la dinámica de crecimiento de las economías emergentes puede llegar a cambiar definitivamente el paradigma sobre los precios de los commodities, beneficiando a los exportadores netos de materias primas, pero conviviendo con mayores tasas de inflación.

Calificadoras de Riesgo, tarde pero seguro…

La historia parece repetirse. Las calificadoras de riesgo no se aggiornan a la etapa post-crisis subprime y los errores vuelven a repetirse una y otra vez. Siempre parecen correr detrás de los acontecimientos y esta semana la historia volvió a hacerse presente.
La semana que nos dejó mostró dos acciones de la calificadora de riesgo Moody’s que son difícil de justificar: por un lado rebajó la calificación soberana de la deuda de Irlanda en cinco escalones y, por el otro, puso en revisión negativa la calificación de deuda de España. ¿Estas medidas no sirven tan sólo para retroalimentar la crisis?. ¿Se repiten nuevamente los errores del pasado?.
Si rememoramos lo que pasó con la Argentina antes del colapso del 2001 desde la concepción de la calificación de la deuda doméstica nada hacía presagiar el abrupto final de la Convertibilidad. La Argentina era, en la década de los ’90, el modelo de país a seguir por parte de las economías emergentes. Los elogios eran permanentes y consistentes con los modelos de evaluación de riesgos por parte de las calificadoras. Sin embargo, una vez evidenciada la crisis y la agudización de la misma, las calificadoras golpearon aún más al país, sin haber siquiera alertado anteriormente por el deterioro de la actividad económica que se percibía en el país.
La crisis subprime, que tuvo sus inicios a finales de 2007 y como punto de mayor ebullición el año 2008, nos deja una lección similar. Instrumentos estructurados que habían sido calificados como triple AAA fueron los principales causantes de la crisis financiera más grande desde la segunda posguerra. Nuevamente las calificadoras fallaron en su rol de prevención para los inversores alertando sobre los riesgos que se corrían al invertir en estos productos y comenzaron a revisar sus calificaciones una vez estallada la crisis. La gravedad de la misma fue tal que el accionar de las tres calificadoras más importantes del mundo fue muy cuestionado en más de una oportunidad, impactando negativamente en la confiabilidad de sus reportes.
En la última crisis de la zona euro, más específicamente en el grupo de países denominados PIIGS (Portugal, Irlanda, Italia, Grecia y Spain), la situación parece no haber cambiado para mejor sino todo lo contrario. Una vez estallada la crisis en Grecia y alcanzado el salvataje financiero con el FMI, las calificadoras pusieron en duda la capacidad de pago del país helénico. Lo mismo ocurrió esta semana con Irlanda, cuando la calificadora Moody’s decidió rebajar en cinco escalones la calificación soberana del país, cuando todo el mundo ya estaba al tanto de la difícil situación de las cuentas irlandesas y el rescate por parte del FMI y la Eurozona era un hecho.
Lo mismo ocurrió con España, un país donde el desempleo había llegado a un récord, donde fueron anunciados dos paquetes de ajustes fiscales muy agresivos, donde se piensa en subir la edad jubilatoria para evitar el colapso del sistema previsional y donde el crecimiento económico es una utopía. Hicieron falta todos estos acontecimientos para que recién una calificadora de riesgo alertara sobre el deterioro de España y decidiera rebajarle el outlook.

La cuestión de fondo es si las calificadoras de riesgo sirven como agentes para prevenir y alertar a los inversores sobre los riesgos que pueden verificarse al inveritr en un instrumento ó  deuda de un país ó bien si se comportan de manera prociclica y siempre están detrás de los acontecimientos y no anticipan los escenarios que vendrán. El dilema está abierto y cada uno puede sacar sus propias conclusiones.

Perspectivas 2011: Las economías desarrolladas buscan retomar el liderazgo

Estamos en el final de un año 2010 de recuperación económica global dispar. Mientras que las economías emergentes aprovecharon el viento de cola de suba de los precios de los commodities y el aumento de la demanda por parte del gigante asiático, China, las economías desarrolladas mostraron todavía sus falencia y heridas que dejó la crisis para poder liderar el crecimiento económico global.
En este contexto, la mayor economía del mundo, Estados Unidos, cierra el año con mejores perspectivas para el 2011 que las que se tenía a mitad de año. El acuerdo entre Republicanos y Demócratas en lo respectivo a la extensión de la rebaja impositiva aplicada en la administración Bush para los ciudadanos podría impulsar la confianza y el consumo en el año próximo. Las estimaciones de crecimiento económico para el año que empieza han sido revisadas al alza y el consenso espera en promedio un avance del PBI en torno al 3,2%. Asimismo, los últimos indicadores económicos sugieren que la economía ha ganado momentum, aunque la gran deuda pendiente es la reactivación del mercado laboral que sigue mostrando muchas debilidades a la hora de crear empleo.
Por su parte, la zona euro parece tener más incertidumbres que certezas. Las debilidades fiscales de muchos de sus países llevaron a la aplicación de salvatajes ecnómicos para Grecia e Irlanda y está en tela de juicio la capacidad de pago de Portugal y España, países que son altamente seguidos por los inversores esperando alcanzar mayor previsibilidad en torno a la evolución de sus economías. A excepción de Alemania, donde la economía parece traccionar positivamente, la zona Euro se encuentra en la paradoja de recuperar la senda del crecimiento económico con planes de agresivos ajustes fiscales que pueden tener el efecto contrario al buscado.
Para los países emergentes, si bien las perspectivas no son tan favorables como en el 2010, el año 2011 aparece como un año de oportunidades y crecimiento. La robusta demanda de las economías más grande del mundo y el alto precio de las materias primas son los dos drivers principales que motorizan el crecimiento económico. De todas formas, el gran dilema pendiente es lograr una mayor equidad en la distribución del ingreso.
Los mercados financieros muestran una gran liquidez y apetito por riesgo por lo que la renta variable se perfila como más atractiva que la renta fija, sobre todo teniendo en cuenta de que las tasas de interés a nivel mundial están muy deprimidas y podría haber un mecanismo de reversión si es que la recuperación económica es más sólida que la esperada. También habrá que tener especial atención con lo que pasa con la inflación, ya que las suba de las materias primas sumado a la gran inyección de dinero en la economía mundial por parte de las principales autoridades monetarias del mundo pueden retroalimentar este proceso.
Las perspectivas en 2011 son positivas, aunque todavía hay desafíos por resolver. Los mercados emergentes tienen la gran oportunidad de seguir creciendo y desarrollándose al ritmo del mayor crecimiento de estas economías. En tanto, las economías desarrolladas buscarán la forma de deja atrás los efectos de la devastadora crisis financiera que tuvo como máxima expresión la desaparición de Lehman Brothers.

El euro pide más esfuerzos del BCE

El pasado 17 de octubre escribí una nota en función de si el euro podría continuar subiendo con los graves problemas de deuda y fiscales que se verificaban en el Viejo Continente. Mi respuesta fue que la zona de u$s 1,43 era un buen nivel para entrar con una posición “short” en esa moneda Es-sostenible-la-suba-del-euro.html . La moneda europea efectivamente tocó niveles de u$s 1,425 y retrocedió en menos de un mes y medio por debajo de u$s 1,30 tras agudizarse los problemas en Irlanda, Portugal y España. El salvataje irlandés y algunas políticas de ajuste anunciadas por Portugal y España permitieron un rebote técnico.
Los inversores aún se muestran cautelosos y con incertidumbre en torno a qué pasará en la zona euro. Si bien las medidas anunciadas por los países en una situación más delicada están en el buen camino según las perspectivas de los mercados, claramente dichas políticas están repercutiendo negativamente en los aspectos sociales y el ánimo del consumidor, lo que puede generar un efecto económico adverso.

Euro / US Dollar FX…

(EUR=X)

1.341     0.0002  (+0.01%%)
Currency Exchange

Por otro lado, se observa que el Banco Central Europeo no está respondiendo con la velocidad que la crisis requiere y se mantiene dentro de sus parámetros para ejecutar su política monetaria, claramente una postura distintiva respecto el comportamiento de la Reserva Federal. Esta semana se esperaba que la máxima autoridad monetaria europea anunciara medidas adicionales para mejorar los perfiles de deuda de España y Portugal, pero eso solo quedó en deseos de los mercados.
Esta situación se asemeja a los tiempos en que cuando cayó Lehman Brothers en 2008, el Banco Central Europeo rechazaba coordinar políticas con sus pares en el mundo (Banco Central de Japón, Banco Central de Inglaterra y la FED) hasta que la crisis le torció el brazo y obligó a colocar las tasas de interés en el mínimo histórico.
Es cierto que un euro débil es más confortable para los países de la región en lo referente a competitividad de sus exportaciones y el sector del turismo. Sin embargo, la volatilidad implícita de la moneda en la actualidad no es óptima para poder proyectar inversiones de mediano y largo plazo. El mercado espera con ansias una reacción del Banco Central Europeo en el corto plazo que lidere la salida de la crisis de la zona euro y se transforme en la principal carta institucional de la región.

En lo respectivo a los technicals, la zona 1,27 / 1,285 parece ser el soporte principal de corto plazo que debe ser respetado para evitar bajas superiores en la moneda.