Las acciones de Edenor y un complicado 2014

 
Las acciones de Edenor (EDN) podrían volver a caer durante este año tras haber ganado un 234,90% en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA) durante 2013, debido a que se espera que sus cuentas muestren un patrimonio neto negativo en 2014 y a que no se avizora un aumento tarifario en el corto plazo.
El alza que vivieron sus papeles en los últimos meses se debió principalmente a compras especulativas, por lo que los especialistas del mercado consultados por Sala de Inversión América le auguran tiempos difíciles por delante.
Uno de los problemas de la compañía tiene que ver con las deudas en dólares que contrajo en los últimos años, ya que la devaluación constante que viene teniendo el peso argentino impactará negativamente sobre su balance.
“Si no hay aumentos en sus ingresos por ventas, esperamos que las pérdidas operativas sigan aumentando. Por otro lado, en 2014 volverá a impactar negativamente el aumento salarial de las paritarias aún en negociación, el aumento de costos y las multas y sanciones recientemente conocidas. Todo ello volverá a erosionar el patrimonio neto de la empresa, al punto de volver a ser negativo como sucedió en 2013”, explica Guido Bizzozero, analista de Allaria Ledesma.
Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global, coincide y agrega un dato que resulta escalofriante para los accionistas de la firma. “Es una empresa casi quebrada desde lo financiero”, afirma.
“La perspectiva negativa refleja nuestra expectativa que los márgenes y flujos de fondos de Edenor continuarán deteriorándose, dada la sostenida presión de los costos y la falta de un mecanismo viable para recuperar este incremento de costos. Si los márgenes y la generación de efectivo continúan su tendencia a la baja y las presiones de costos adicionales no son atendidas mediante un aumento o un ajuste de sus tarifas, las calificaciones podrían, muy probablemente, experimentar una baja adicional”, afirma un informe de Moody’s publicado el 20 de diciembre de 2013.
La agencia le bajó la calificación a la distribuidora de energía debido el pobre desempeño operativo que mostró durante el primer semestre del año pasado, su insuficiente generación de efectivo y su liquidez extremadamente débil.
El congelamiento de tarifas para el sector público en general por parte del gobierno de Néstor y Cristina Kirchner hace más de diez años ha ahogado a las compañías a nivel financiero, pero durante 2013, las expectativas de algún cambio al respecto impulsaron fuertemente al alza a los papeles del sector energético argentino.
Sin embargo, los especialistas se muestran pesimistas ya que no esperan incrementos tarifarios en el corto plazo y, por eso, sus acciones no replicarían la performance que tuvieron en los últimos doce meses en la BCBA.
“El año pasado, la compra de acciones de Edenor tuvo un componente especulativo y de oportunidad muy grande por su posición técnica, tratando de anticipar el momento en que las energéticas puedan volver a facturar algo más – explica Federico Fiscella, administrador de carteras en Rosental -. La relación entre el gobierno y el sector ha sido siempre hostil en cuanto al manejo de las tarifas, lo que sucede es que el mercado observó que el gobierno estaba entrampado con el tema, perdiendo su bien más preciado, las reservas, por la importación de energía que demanda la economía. Ese fue el fundamento de los inversores: anticiparse al momento en que el gobierno se vea forzado a encarar un plan para el sector”.
Según el especialista, “el gigantesco atraso que aún tiene la cotización en función del congelamiento de tarifas, hace que cualquier rumor sobre un avance político sobre el tema tarifario haga disparar los precios”.
Martínez Buzaco coincide y agrega que “se trata de inversores que buscan especular con una mejora en la situación financiera de la empresa a partir de un aumento de las tarifas. No se trata de inversores de largo plazo”.
Por su parte, María Belén Matar, operadora de Bell Sociedad de Bolsa, afirma que “muchos ingresaron a Edenor con la idea de que el Estado tome las riendas y suponiendo que iba a replicar el movimiento de YPF (YPF), un papel que subió con fuerza en 2013. En realidad, es bastante lógico pensar que si año a año aumentan los consumos en energía, el papel debería subir”.
En tanto, Martínez Burzaco resalta que el alza que tuvo la compañía “responde a expectativas de incrementos tarifarios, pero esa idea perdió un poco de momentum tras la crisis energética de fin de diciembre. En principio, tiene que haber una recomposición tarifaria importante para cambiar las expectativas. En el corto plazo, no se va a dar”.
Esta problemática ha llevado a las empresas del sector y, especialmente a Edenor, a congelar sus inversiones y a verse imposibilitadas para tomar créditos. Las consecuencias directas de esta situación se vieron en diciembre cuando, ante los picos de demanda de electricidad, se produjeron cortes de luz en la ciudad de Buenos Aires y alrededores, lo que, a la vez, generó un descontento social contra la firma.
“En relación a las empresas distribuidoras, no veo una mejora durante la gestión política actual”, resalta Fiscella y una fuente del mercado afirma que hablar de Edenor es como escribir ciencia ficción: puede suceder cualquier cosa; la decisión la tiene el Gobierno”.
No obstante, más a largo plazo y desde una perspectiva técnica, el analista Julián Yosovitch de Ruarte’s Report es optimista: sus acciones “han avanzado de manera tendencial entre los mínimos de diciembre de 2012 de 1,65 dólares hasta los máximos de 9,60, generando subidas en 5 movimientos. Por ende, el recorte actual deberá ser entendido como contra-tendencial y finalizará en los mínimos mencionados, a la espera de que la tendencia alcista quede retomada rumbo a nuevos máximos, generando ascensos aún más dinámicos que los vistos hasta ahora”.

Las acciones argentinas terminarían 2013 con gran volatilidad


Diciembre podría ser un mes con alta volatilidad para las acciones argentinas por las nuevas medidas implementadas por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner para intentar poner freno a la salida de dólares del país y a la merma de reservas del Banco Central (BCRA).

Desde 2102, a partir de la profundización de la restricción a la compra-venta de divisas, muchos inversores adquirieron papeles en pesos en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA) y pidieron su transferencia a los Estados Unidos – donde varias empresas locales cotizan a través de ADRs -, para venderlas y obtener billetes verdes.

Este mecanismo viene siendo utilizado como forma de cobertura frente a la devaluación del peso argentino, por lo que la subida o la bajada del precio del dólar tiene relación directa con los movimientos en el mercado de renta variable local.

“Va a ser un mes con mucha volatilidad, a pesar de que diciembre suele ser un buen mes para los mercados”, señala María Belén Matar, operadora de Bell Sociedad de Bolsa.

Desde Inversor Global, su economista jefe, Diego Martínez Burzaco, concuerda. “Generalmente, es un mes positivo para el mercado, pero esta vez dependerá mucho de la discrecionalidad oficial”, indica.

A dos años del llamado “cepo cambiario”, la Argentina tiene ahora dos tipos de cambio oficiales: el oficial-oficial y el dólar-turista, ya que el Gobierno elevó del 20% al 35% el pago a cuenta del Impuesto a las Ganancias y Bienes Personales aplicado sobre las compras realizadas con tarjetas de crédito y/o débito en el exterior.

La reacción del mercado fue negativa: este martes, la BCBA cayó un 4,30%. “El malhumor de los inversores se vio reflejado en los precios de las acciones del Merval 25, dado que la caída fue generalizada”, sintetizan los analistas de la consultora Research for Traders en un informe.

La racha negativa de tres días, tras un período de euforia para el indicador argentino, se cortó ayer, cuando cerró con una ganancia leve, del 0,36%. En lo poco que va de diciembre, el Merval lleva perdido un 7,13%, cuando hasta finales de noviembre acumulaba ganancias del 100,40% y del 60,20% medido en dólares, lo que representa la mayor subida anual desde 2009, de acuerdo a un informe del Instituto Argentino de Mercado de Capitales (IAMC).

“La medida del Gobierno tiene gusto a poco; el mercado espera ajuste de tarifas o reducción de subsidios, porque lo que hizo es limitar la salida de dólares pero no soluciona el problema de fondo, que es la pérdida de dólares por el enorme déficit energético”, apunta Matar, que no descarta que se tomen medidas después de las fiestas porque “tarde o temprano, en algún momento, van a tener que ajustar. Algo va a pasar”.

Lo que hace el Gobierno con esta medida es “cortar una fuente de drenaje; el efecto inicial es indudablemente favorable. Pero hay que ver que no genere más incertidumbre, más tentación a escapar del peso y, por lo tanto, una mayor presión sobre la brecha cambiaria”, decía Hernán Lacunza, director de Empiria Consultores, al diario El Cronista.

“No veo una solución de fondo al problema de la caída de las reservas y eso es lo que determina hoy el movimiento de la divisa – señala Martínez Burzaco -. Con las últimas medidas, creo que en el mediano plazo el dólar informal seguirá subiendo, con lo que impulsará al Merval al alza. En el corto plazo, es muy difícil saberlo porque si el Gobierno sigue actuando sobre el contado con liquidación (el dólar que se obtiene por medio de la compra y venta de acciones y bonos en la BCBA) vía venta de bonos es probable que le ponga un freno a la subida”.

Pese las nuevas medidas, el dólar turista subió ayer a 8,37 pesos, el paralelo o “blue” volvió a trepar hasta los 9,62 y el contado con liquidación ascendió a 8,48. Por su parte, el oficial finalizó el día con un alza de dos centavos, hasta cerrar a 6,20 pesos. Así, el ritmo anual de devaluación ya se ubica en el 48%.

Las acciones de Grupo Financiero Galicia podrían subir un 44% en 2014


Las acciones de Grupo Financiero Galicia (GGAL) podrían subir hasta un 44% en 2014 y alcanzar un valor cercano a los 15 dólares en la Bolsa de Nueva York (NYSE), de la mano de los buenos resultados que viene mostrando en los últimos trimestres.

En tanto, en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA), sus papeles continúan a precios atractivos, pese a acumular ganancias de más del 90% en lo que va de 2013, según especialistas del mercado consultados por Sala de Inversión América, quienes aseguran que todavía tienen margen de subida para igualar a sus pares latinoamericanos.

“Grupo Galicia es la mejor empresa del (índice) Merval, y pertenece al sector más rentable de la Argentina, porque el modelo económico actual está orientado al consumo y los consumidores financian sus compras con las tarjetas de los bancos. Por eso, junto a Telecom Argentina (TEO), siempre fue mi favorita”, dispara Federico Fiscella, administrador de carteras en Rosental.

En el mismo sentido opina Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global, y destaca que “particularmente, el balance de Galicia ha sido muy auspicioso, superando las expectativas. En parte, el banco justificó el fuerte rally que mostró en los últimos meses. Si bien ha hecho el catch up con bancos latinoamericanos, su P/E (ratio price to earnings) en torno a 7 veces todavía le deja margen alcista, aunque más limitado”.

La entidad sorprendió la semana pasada al reportar un aumento en sus ganancias netas del 54% en el tercer trimestre, cuando ganó 536 millones de pesos argentinos, frente a una utilidad neta de 347,20 millones en el mismo período del año anterior. Según un sondeo de Thomson Reuters, el mercado esperaba 420 millones.

Por su parte, sus ingresos financieros alcanzaron los 3.412,1 millones de pesos, lo que implica un salto del 48% en comparación con el mismo período de 2012, en tanto que en forma secuencial crecieron el 16%.

Para Federico Fiscella, el bancario es el único negocio que le puede ganar al aumento sostenido de precios al consumidor y mayoristas que vive actualmente la Argentina.

“Es la única estructura empresaria que puede capitalizar la inflación, por eso, creo que Galicia va a seguir presentando balances de buenos a excelentes en los próximos trimestres”, afirma y destaca que sus acciones siguen estando “regaladas en relación a los bancos de la región”.

Fiscella interpreta que pese a “la reforma de la carta orgánica del BCRA (Banco Central) y la presión contra el sector, la entidad acumuló una serie de balances interesantes y a partir del 11 de agosto, cuando cotizaba en Nueva York a 5 dólares y operaba 500.000 dólares – un promedio de 100.000 por día – pasó a valer cerca de 10 y a operar unos 10 millones -, y todavía no ha recompuesto todo el valor”.

Otra fuente del mercado apunta que “se achicó bastante la diferencia con sus pares latinoamericanos, pero todavía hay margen de subida. Las perspectivas a largo plazo siguen siendo favorables y el balance del cuarto trimestre puede ser mejor todavía”.

A juzgar por Fiscella, actualmente el papel se encuentra en un momento de “más volatilidad, y en la mitad de una tendencia que tiene que ir hacia los 13-15 dólares aproximadamente, y a los 12-14 pesos a nivel local”. En la BCBA, la acción cerró ayer a 9,68.

Desde una perspectiva técnica, no obstante, el papel se encuentra actualmente en “el cuello de la figura correctiva amenazante de hombro cabeza hombro”, advierte Julián Yosovitch, desde Ruarte’s Report.

“Toda la atención se centra en el comportamiento de tal soporte y deberemos ver reacciones alcistas inmediatas, evitando que la acción perfore dicho valor y llevando al mercado rumbo a zonas superiores, de regreso a los 11 dólares primero y a los 11,66 luego, junto a los máximos previos, buscando acceder a valores superiores más tarde, hacia los 12,10-12,50 dólares, junto a escollos superiores, todo ello como parte de la onda 5 de mediano plazo”, resalta.

Martínez Burzaco se muestra cauto respecto al futuro de sus acciones. “En líneas generales, Galicia pertenece a un sector que continúa mostrando atractivo para 2014, aunque no hay que dejar de lado los desafíos planteados al momento de invertir”, explica.

A su entender, el próximo año habrá dos desafíos importantes: si la tasa BADLAR continuará subiendo para ir compensando la inflación, y la vulnerabilidad supuesta que enfrentan las entidades ante la debilidad de las finanzas del Gobierno y su necesidad de fondos. “En este sentido, la liquidez bancaria puede verse afectada”, advierte el economista jefe de Inversor Global.

Con todo, Martínez Burzaco sigue creyendo que Grupo Financiero Galicia “puede ser una buena inversión para ganarle a la inflación”, pero no ve subidas “tan fuertes” por delante.

IRSA, una alternativa de cara al 2014

Por Sala de Inversión 


Las acciones de IRSA (IRS) mantienen su potencial alcista de cara a 2014, pese a una decisión judicial que podría paralizar la construcción del shopping Arcos Gourmet, en el barrio porteño de Palermo.
Según los especialistas, sus papeles podrían subir hasta un 44% en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires (BCBA) y alcanzar los 11,30 pesos argentinos a fines del año próximo.
El juez en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad de Buenos Aires, Aurelio Ammirato, determinó que las obras del futuro centro comercial no contaban con todos los permisos correspondientes y ordenó su paralización, tras una denuncia de legisladores y vecinos.
Sin embargo, la propia empresa y analistas consultados por Sala de Inversión América aseguran que la firma no recibió notificación alguna hasta el momento.
IRSA “no sólo no es parte de la acción legal, sino que no hemos sido notificados de la resolución del juez, por lo que se sigue trabajando normalmente”, afirma un vocero de la compañía.
Por su parte, Leila Abuchaem, analista de Allaria Ledesma, sostiene que la empresa “espera lanzarlo en noviembre y de recibir la notificación oficial, volverán a mandar los documentos necesarios, que ya enviaron en su momento y que fueron aprobados por las autoridades, y esperarán que lo habiliten nuevamente”.
Abuchaem volvió a recomendar “comprar” sus acciones e incrementó su precio objetivo hasta los 11,30 pesos para 2014, más un 3,10% en concepto de dividendos.
En caso de que la Justicia paralice las obras de Arcos Gourmet, esto tendría “consecuencias en las perspectivas de la propia empresa” en el mediano plazo. “Es algo que no se vería ahora, sino en los próximos balances. En síntesis, sería una mala noticia de cara al futuro. IRSA tiene proyectos ambiciosos y, entonces, hechos de este tipo generan incertidumbre, porque es algo que podría pasar con otros proyectos de inversión”, afirma Mauro Morelli, analista de Ravaonline.
En opinión de Abuchaem, se trata de “una cuestión política, para meter ruido porque la empresa siempre cumplió con todo lo que le pedían para comenzar las obras y no es la primera vez que le pasa”.
Arcos Gourmet, erigido en los predios del ferrocarril San Martín del barrio porteño de Palermo, contará con 60 locales –ya casi todos alquilados–, y las obras finalizarían antes de fin de año.
De cara a los inversores, Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global, considera que la acción de IRSA “está atractiva, sobre todo teniendo en cuenta que la empresa es la principal exponente del consumo en la Argentina, en un contexto de alta inflación. En la medida que haya medidas que estimulen y aceleren el gasto, puede repercutir en las ganancias de la compañía”.
Abuchaem concuerda y espera que los “centros comerciales sigan mostrando la buena performance vista hasta ahora, con un crecimiento en las ventas, acompañando la inflación”.
Allaria Ledesma estima en su último informe un margen EBITDA estable en torno al 50% para IRSA durante los próximos años para este segmento de negocio.
Por eso, “para diversificar el portafolio, mirando el largo plazo, puede ser una buena jugada. El management es muy bueno y en las última ruedas está haciendo mayor volumen”, dispara Martínez Burzaco.
IRSA cerró su año fiscal 2013 a principios de este mes con una ganancia neta que se incrementó un 32,30% a 297,20 millones de pesos frente al mismo período del año anterior.
Por su parte, su EBITDA creció un 40% respecto a 2012, basado en la consolidación del edificio Madison en Nueva York y por la buena performance de los segmentos centros comerciales, oficinas y ventas y desarrollos.
Las ventas en los shoppings, la parte más importante de su balance, crecieron un 25,20% y la ocupación de su portfolio de locales se incrementó al 99,10%.
Las perspectivas de la propia empresa son positivas. “En relación al negocio de centros comerciales, la industria en la Argentina tiene mucho espacio para crecer y contamos con reservas de tierras estratégicamente ubicadas en la ciudad de Buenos Aires, Gran Buenos Aires y el interior del país como para duplicar el portfolio actual, así como también con la posibilidad de ampliar las superficies de la mayoría de nuestros actuales shoppings”, destaca su titular, Eduardo Elsztain.
A su vez, sostiene que IRSA cuenta con “importantes reservas para construir oficinas Premium en la ciudad de Buenos Aires y desarrollos residenciales y de usos mixtos de gran escala en todo el país”.
“Seguimos analizando el mejor momento para lanzar estos proyectos y otros según las oportunidades que puedan surgir. A largo plazo, seguimos creyendo en el potencial del sector inmobiliario argentino, teniendo en cuenta que la amplia mayoría de las propiedades de real estate en el país carecen de endeudamiento y el déficit habitacional existente en el país supera las 4 millones de viviendas”, resalta.
En Allaria Ledesma, elevaron la estimación de ventas y EBITDA para 2014 en adelante “dado el mayor crecimiento esperado para el segmento de centros comerciales” e hizo lo propio con los márgenes respecto de su estimación anterior “ante la mejora observada en el segmento de oficinas para alquiler”.
Como riesgos, Martínez Burzaco señala que “la principal incógnita es cómo enfrentan los shoppings la desaceleración económica y si eso aumenta la vacancia de los locales”.

¿Se terminó el alza de las acciones de construcción en EEUU?

Por Sala de Inversión

Las acciones de empresas vinculadas al sector de la construcción en los Estados Unidos se encuentran en la mira de los inversores tras haber sido una de las vedettes del año pasado con alzas que superaron el 78%.

Si bien, las subidas podrían continuar en 2013 los analistas estiman que se producirán en niveles muy inferiores y se moverán de la mano de los resultados que muestren los diferentes indicadores macroeconómicos vinculados a esta industria en el país, aunque con rangos mucho más bajos.

En 2012, las constructoras como Dr. Horton (DHI), Lennar (LEN) y Toll Brothers (TOL), entre otras, vieron subir sus acciones un 88%, 110%, y 78%, respectivamente, algo poco común en este rubro.

Esto se debió, principalmente, a las tasas de interés en los Estados Unidos, que se ubicaron en mínimos históricos y al menor nivel de inventarios que propulsó la demanda de viviendas tras haber registrado su mayor desplome desde 1930.

Con la confianza de los constructores en su nivel más alto en más de seis años y las ventas de nuevas viviendas creciendo a una tasa anualizada del 15,30% y los precios subiendo un 5,50% anual, parece que el mercado inmobiliario lleva camino de superar el desempeño de la economía en general durante los próximos años.

“El sector encontró un punto de inflexión en 2012, lo que es un síntoma positivo. No sólo se ha estabilizado, sino que ha vuelto a mostrar cifras de crecimiento, algo que no se vislumbraba desde antes de la crisis subprime en 2007”, sostiene el economista jefe de Inversor Global, Diego Martínez Burzaco.

Aunque algunos inversores creen haber perdido el tren de las oportunidades después de las impresionantes alzas bursátiles del año pasado, todavía queda vapor en este tren.

“Los precios de las acciones en el mercado de bienes raíces todavía son muy bajos, al igual que los niveles de actividad desde un punto de vista histórico, por lo tanto, queda un buen recorrido alcista de mediano y largo plazo”, afirma el analista de Sala de Inversión Andrés Cardenal, quien añade que aunque “no va a ser todo color de rosas, a medida que el mercado recupera comenzarán a salir a la venta activos que no estaban en oferta debido a los bajos precios, elevando el inventario.

Un crecimiento saludable para el inicio de construcción de viviendas sería de 1,50 millones de unidades anuales y, si desde 1959 a 2007 no se bajó del millón, en los últimos cinco años el promedio osciló entre 500.000 y 800.000.

Aunque este ajuste era necesario para quemar los excesos de inventario acumulados a mediados de la década del 2000 en plena efervescencia del boom inmobiliario (más tarde burbuja), hoy en día la oferta y la demanda están cerca de alcanzar un equilibrio que podría dar lugar a un constante aumento en los inicios de obras.

Pese a esto, las compras de los inversores se encuentran frenadas debido a tres razones fundamentales. La principal es el temor a que no quede mucho valor por destapar tras las abruptas subidas que tuvieron las acciones líderes del sector en 2012.

Nadie busca invertir antes de que ocurran correcciones significativas. “No sería de extrañar que en algún momento se produzca un ajuste dado que estas acciones han subido mucho durante el último año. Sin embargo, al ser positiva la tendencia de largo plazo, todavía hay potencial alcista en muchas empresas”, asegura Cardenal.

Martínez Burzaco, coincide y agrega que “las acciones del sector están baratas, en términos relativos. A pesar de la fuerte recuperación, sus múltiplos son saludables. Por ejemplo Dr. Horton tiene un P/E de 8,30x y un P/Valor Libro de 2,10x. Son ratios que indican que todavía tienen recorrido“.

No obstante, en los niveles actuales del mercado los analistas destacan que hay que andar con pies de plomo ya que estos papeles “son bastantes pro cíclicos y la explosiva subida de todo el mercado genera cierta cautela en el corto plazo. Cualquier corrección significativa, en torno al 5%, quizás sea aun buen punto de entrada”, agrega el especialista de Inversor Global.

Otra de las razones que frenan las compras de los inversores es la lenta recuperación que viene mostrando el crecimiento de la economía en los Estados Unidos, que se ha tornado en el mayor obstáculo para la industria.

Cardenal destaca que “obviamente, la marcha de la economía de los EE.UU. con sus temas políticos es siempre un riesgo, pero los problemas que puedan surgir serán transitorios, la tendencia de largo plazo es al alza“.

Finalmente, el último escollo que ven los inversores para adquirir estos papeles es la escasez de mano de obra en el sector de la construcción, como recientemente afirmó David Crowe, economista senior de la Asociación Nacional de Constructores, que además señaló que “muchos constructores se quejan de que no encuentran suficiente personal, ni subcontratistas, y son incapaces de obtener la mano de obra necesaria para construir incluso las órdenes (backlog) en sus libros”.

Esto podría ejercer presión en la cadena de abastecimiento disparando los salarios y el precio de las propiedades, pisando a su vez el freno del crecimiento de este rubro y achicar los márgenes operativos brutos de las empresas.

Aunque podría pensarse que todas las acciones del sector acabarán beneficiándose de este retorno a la normalidad, siempre es necesario separar las buenas manzanas de las malas. Entre las apuestas del sector, Martínez Burzaco destaca a la constructora de viviendas de lujo Toll Brothers.

“Se enfoca en un segmento de mayor poder adquisitivo, lo cual le permite obtener mayores márgenes de ganancia por precios más altos. El grupo demográfico al cual apunta tiene muchas ventajas, como mejor calificación crediticia, menores tasas de desempleo y una preferencia por viviendas nuevas en lugar de pre existentes”, resalta.

Por su parte, Cardenal agrega que “financieramente (Toll Brothers) ha tenido mejor performance que muchos de sus competidores, tanto en ventas como en la reducción de deuda y aumentos de rentabilidad”.

Sin embargo, los analistas internacionales sondeados por Thomson/First Call le ven poco margen de crecimiento a sus papeles ya que en promedio estiman un precio objetivo de 37 dólares frente a los 36,42 en los que se encuentra actualmente.

A su vez, Martínez Burzaco también señala entre sus favoritas a “Standard Pacific Corporation (SPF) una pequeña empresa del sector, que tiene una interesante potencialidad, aunque es una acción extremadamente volátil con un beta de 2,40. Sus múltiplos son atractivos: P/E de 6,35x y P/VL de 1,35”.

En esta caso, los especialistas consultados por Thomson/First Call estiman una mejora un poco mayor ya que fijaron un precio objetivo promedio de 8,25 dólares frente a los 7,85 actuales, lo que implica una perspectiva de apreciación del 5,10%.



Acciones bancarias en los EE.UU., ¿buena opción en 2013?

Por Sala de Inversión

Si el sector de la construcción en los Estados Unidos fue la revelación de 2012, lo mejor de todo es que esta bonanza bursátil la comparte con el financiero, otro de los de mejor desempeño gracias a la recuperación de los préstamos hipotecarios y la expansión del crédito de consumo.
De acuerdo con el analista de Sala de Inversión, Andrés Cardenal, el sector financiero se posiciona en un lugar muy favorable para capitalizar la continuidad de la recuperación inmobiliaria este año, particularmente las entidades de gran tamaño.
“Bancos como Wells Fargo (WFC) o JP Morgan (JPM) tienen mayor calidad, y por tanto son más defensivos y estables. Pero por otro lado Bank of America (BAC) y Citigroup (C) al estar muy subvaluados tienen un mayor potencial de ganancias en un escenario de recuperación fuerte para el sector”, señala.
Aunque las instituciones financieras que forman parte del índice S&P 500 avanzaron un 24% en 2012, protagonizando su mayor rally en nueve años, y en términos de valuación se encaminan a alcanzar precios pre crisis 2008, en opinión del economista jefe de Inversor Global, Diego Martinez Burzaco, todavía queda mucho por hacer en términos de actividad de intermediación financiera .
“Las hojas de balances de las entidades han mejorado, pero persisten algunos problemas sin resolver y el mercado de hipotecas todavía tiene un largo camino que recorrer para regularizarse”, explica el expertoa Sala de Inversión América.
Aún en este contexto, las señales de recuperación del sector inmobiliario llevaron a las principales firmas de Wall Street a elevar estimaciones de beneficios un 32% para el cuarto trimestre, la mayor revisión entre las diez industrias del S&P 500.
“Entre las virtudes debemos destacar la sólida posición de caja (especialmente en Estados Unidos), la vuelta al pago de dividendos en efectivo y la posibilidad de iniciar programas de recompra de acciones. Entre los riesgos potenciales hay que considerar la debilidad de la economía de EE.UU., el incremento de la prima de riesgo en la Unión Europea y la exposición de los bancos a bonos de países financieramente complicados (Italia, España, Grecia) ”, señala Martínez Burzaco.
En tanto, Ariel Squeo, Director de ICB Argentina, argumentan que la recuperación del mercado financiero se produjo mucho antes, a partir de mínimos de octubre de 2011, y lo atribuye al retraso que presentaba respecto al resto del mercado, después de desplomarse un 84% en conjunto durante la crisis financiera.
“Cuando cayó el golpe fue muy fuerte y a la hora de recuperar no lo hizo cuando otros sectores lo hicieron. La subida de los últimos meses sólo ha logrado acomodarlo al resto”, destaca y explica que la mejora del negocio inmobiliario es una de las tantas variables que inciden en el desempeño de la industria financiera, pero no es la más importante. “Desde principios del cuarto trimestre de 2012 y las primeras semanas de enero las dos variables más importantes fueron el ‘Fiscal Cliff’ y la decisión del QE3 de Bernanke”, afirma.
Con la temporada de resultados pisando los talones en Wall Street, los drivers del sector a corto plazo serán los balances del cuarto trimestre fiscal, que estrena esta semana Wells Fargo, el cuarto mayor banco estadounidense.
“Habrá que ser cautos respecto a la potencialidad de las cotizaciones a la luz de la fuerte subida evidenciada. En Estados Unidos, midiendo el P/E y otros ratios de solvencia, me inclino por bancos como Wells Fargo o JP Morgan. En Europa, depende de muchos factores, pero iría a lo más seguro, como puede ser un Deutsche Bank o cualquier otro banco alemán”, comenta Martínez Burzaco.
A juzgar por los últimos resultados conocidos los bancos más sólidos fueron Wells Fargo y JP Morgan Chase con aumentos de ganancias del 22% y 34%, respectivamente. En el caso concreto de JP Morgan, los resultados dieron señales de que el banco se está recuperando del escándalo apodado “la ballena de Londres” (London Whale) que generó enormes pérdidas en una cartera de derivados de créditos de casi 6.000 millones de dólares en el primer semestre.
Pero para los que quieren invertir ‘sobre seguro’ las apuestas recaen sobre Wells Fargo. “Sin lugar a dudas es el banco de mayor calidad entre los grandes, que no cometió los excesos de otros durante la burbuja de crédito, y tiene una administración de riesgo más cautelosa que le permitió salir de la crisis mucho mejor posicionado. Hoy en día es líder en negocios como crédito hipotecario en EEUU gracias a que pudo aprovechar las ventas de activos forzadas por parte de sus competidores”, resalta Cardenal.
En tanto, el analista señala que Bank of America (BAC) y Citigroup (C) pueden tener un potencial más alto que las entidades financieras de calidad, dado que están mucho más baratos, aunque todavía estén tratando de limpiar sus balances.
Para que les vaya bien dependen en mayor medida de que el contexto económico los ayude, que de la calidad de sus activos. No obstante, hay quienes mantienen una visión más cautelosa sobre la industria atendiendo a los precios actuales.
“No tomaría una exposición fuerte en el sector financiero porque está en los niveles máximos de los últimos cinco años y de momento tampoco los está superando”, afirma Squeo, quien tampoco percibe razones para la euforia respecto a los resultados del cuarto trimestre que comienza estos días en el sector.
“La comparativa anual para el sector podría ser positiva, pero respecto al trimestre no soy muy positivo. En cuanto a las ganancias el resto del año no creo que sean favorables, teniendo en cuenta que 2013 será año de ajustes, con mayores impuestos, recortes del gasto y menos ayuda por parte de la Reserva Federal que está dejando ver que no continuará la política expansiva al mismo ritmo”, concluye.

Guía: las mejores opciones de inversión tras el pago del Boden 12

Por el Cronista Comercial (con participación personal)

Tres analistas del mercado elaboraron un punteo sobre las mejores herramientas de reinversión para aquellos inversores que aún no saben qué harán con su dinero una vez que la administración de Cristina Fernández de Kirchner pague en dólares el cupón del Boden 2012.
Diego Martínez Burzaco, economista Jefe de Inversor Global, antes de iniciar su breve lista expresó sus dudas respecto a la posibilidad de que los inversores se desprendan de sus dólares “en momentos en que se enfrentan con un mercado cambiario con restricciones”.
En ese sentido, precisó que como no hay demasiados instrumentos que permitan invertir en dólares directamente, las cinco opciones más interesantes podrían ser:
1. Atesoramiento (en cajas de seguridad).
2. Bonos cortos en dólares del Gobierno (los inversores reinvierten los dólares, cobran alguna renta y recuperan dólares. Esta opción conlleva cierto riesgo).
3. Obligaciones Negociables en dólares de empresas sólidas con buena calidad crediticia (ejemplo, Arcor, Arcos Dorados, Petrobras).
4. Activos del exterior (acciones, ETFs o metales como el oro).
5. Fideicomisos agrícolas (considerando una mejor campaña para el año próximo).
Otro de los que brindó su opinión sobre opciones para reinvertir lo ganado con el Boden 2012 fue Agustín Trella, portfolio manager de Puente.
Para Trella, “los bonos Bonar X y el Boden 2015 surgen como opciones para el inversor ya que presentan una relación riesgo/retorno atractiva”. De todos modos, “también vemos atractivo en los bonos provinciales en dólares de mediano plazo”.
El portfolio manager de Puente coincidió con Martínez Burzaco que “los bonos corporativos en dólares de empresas de primer nivel como Petrobras o Arcor también son una buena opción frente a los plazos fijos en dólares y para destinar parte del flujo”. 
Por último, Sergio de Ilzarbe, asesor financiero de Invertir Online, consideró que el “inversor que se inclinó por el Boden 2012 en su momento fue para hacerse de dólares que de otro modo no podría, por ejemplo, por que los necesita para un viaje”.”Quizá también fue por su perfil de riesgo poco agresivo que ingresó en los Boden 2012″, añadió. 
Por ambos motivo, lo más factible es que este tipo de inversor vuelva a moverse dentro de la curva de bonos con vencimientos 2013 o 2015. En ese sentido, De Ilzarbe opinó que el Bonar VII o Boden 2015 aparecen como las mejores opciones.

Acciones del sector energético argentino: una inversión con demasiado riesgo


Las empresas del sector energético argentino se encuentran al borde del colapso. Los inversores lo saben bien, desarman posiciones, y así, sus acciones se derrumban en Bolsa. Los analistas ya no confían en que el Gobierno autorice un aumento de las tarifas, uno de los motivos principales del presente de números rojos de estas compañías. Y aseguran que invertir en el sector es demasiado riesgoso, incluso en un horizonte temporal de mediano plazo.


En los últimos doce meses, los papeles de las eléctricas Central Puerto, Edenor, Endesa Costanera, Pampa Energía y Transener cayeron en promedio un 50% en la Bolsa porteña. Pero la situación que atraviesa, por ejemplo, Edenor- la mayor distribuidora de electricidad del país en términos de números de clientes y de electricidad vendida- se extiende también a muchas otras empresas prestadoras de servicios públicos, que fueron privatizadas en los ’90.


En el sector del gas, la semana pasada, Transportadora Gas del Norte –que opera en forma exclusiva los dos gasoductos que existen en las regiones norte y centro del país- solicitó su concurso preventivo de acreedores, que fue rechazado por la Justicia, y fue suspendida en Bolsa. En tanto, Metrogas permanece intervenida por el Gobierno desde junio de 2010, cuando entró en default. Y se especula con que el Estado tomará el control definitivo de la distribuidora de gas para evitar su quiebra.


En su pedido a la Justicia, TGN declaró que la falta de actualización de sus tarifas y los mayores costos derivaron en pérdidas operativas en los últimos cuatro trimestres, lo que tornó insostenible el plan de reestructuración de su deuda, pendiente de aprobación judicial desde octubre de 2009, tras alcanzar una aceptación de casi el 88% de sus acreedores. La empresa debe 347 millones de dólares, y desde diciembre de 2008 está intervenida por el Gobierno.


A su vez, el mismo día que TGN pedía su concurso, el lunes 4 de junio, las acciones de Edenor fueron las más perjudicadas en Bolsa: cayeron un 5,5%: los inversores temen por su elevada deuda en dólares y por las dificultades que tiene la compañía para cubrirse contra fluctuaciones del tipo de cambio. Edenor pertenece al grupo Pampa Energía, que perdió 71,4 millones de pesos argentinos en el primer trimestre del año. En el mismo periodo, Edenor sufrió pérdidas aún mayores: 90,60 millones de pesos, un 80% más que en el primer trimestre de 2011.


El viernes pasado, la agencia de calificación crediticia Standard & Poor’s bajó su calificación de CCC+ a CCC, argumentando que se prevé que continúe el pobre desempeño financiero de la compañía en la segunda mitad del año, por “los actuales altos riesgos políticos y regulatorios y la falta de ajustes de tarifas”. Por el mercado corre el rumor de que Edenor podría ser la próxima compañía expropiada por el Gobierno, tras el caso de la petrolera YPF.


También está el caso de Transener, la mayor transportadora del país de energía eléctrica de alta tensión. Standard & Poor’s redujo a B- la calificación de su deuda. Y este año, la compañía pidió una medida cautelar para que el Estado le pague una deuda de 100 millones de pesos. Un 25% del capital de Transener pertenece a Pampa Energía.


En el sector, los tapones están a punto de saltar. “Si no aparece la plata de los sueldos, el lunes hay paro en Edesur y Edenor”, dijo ayer desde su cuenta personal en Twitter, Oscar Lescano, jefe del sindicato Luz y Fuerza. Citando al sindicalista, el diario Clarín había publicado que Edenor y Edesur tendrían problemas en julio para pagar los sueldos.


Un sector con perspectivas de mayor deterioro


Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global, es categórico. “El sector de servicios públicos no reviste ningún atractivo en el corto plazo ni en el mediano plazo”, dispara. El experto no ve intenciones de cambio por parte del Gobierno en la aplicación de medidas y políticas hacia el sector, ya sea tarifas públicas o incentivos para invertir.


Según Martínez, “viendo lo que ocurrió con YPF, creo que de surgir un nuevo problema energético, las empresas serán el chivo expiatorio del Gobierno y podrían ser víctimas de nuevas expropiaciones”.


El responsable del área de Research de Puente, Leonardo Bazzi, apunta que “Edenor probablemente podría tener problemas para pagar su deuda en dólares y para el pago de salarios. En el mercado existe el rumor de que el Estado tome mayor control de CAMMESA (Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima), con lo que la empresa sería beneficiada”.


Según Bazzi, “la situación en algunos casos es delicada a nivel financiero y se va a mantener la volatilidad en este tipo de acciones. Pero muchos creen que el Gobierno va a intervenir para asegurar que el servicio no sea afectado”.


La visión de Andrés Cardenal, analista CFA Charterholder, es similar: “En el caso de Edenor, la empresa sigue perdiendo dinero y tiene una situación financiera comprometida; si no se le da un aumento de tarifas, tarde o temprano terminará quebrada”. Este experto también cree que probablemente, la compañía entrará en default y el Gobierno se hará cargo de la empresa mediante negociaciones con los acreedores.


El economista jefe de Inversor Global agrega que “estas compañías están en zona de pérdida operativa, con costos crecientes y precios congelados de sus ventas, mostrando una dinámica peligrosa. Además, tienen deuda en dólares, con lo que implica hoy tener pasivos dolarizados en un contexto de complicaciones en el sistema cambiario argentino. La depreciación del dólar le genera pérdidas financieras”. Andrés Cardenal redondea el pronóstico negativo, diciendo que “con los números al rojo vivo es muy poco probable que la empresa invierta, entonces es complicado compararlas con otras compañías de la región. El tema de las tarifas no solo impacta en la rentabilidad actual del negocio, afecta también a las inversiones de la empresa y, por lo tanto, su capacidad de operar eficientemente en el futuro”.


En Puente creen que el sector tiene una visión muy estable: “no esperamos cambios y no vemos valor en el corto plazo: la situación financiera no es saludable; al sector le llevará algunos años volver a ser rentable”. El jefe del área de Research de esta firma asegura que “las perspectivas son de un mayor deterioro en el futuro. Podría haber canje de deuda o reestructuración de la misma. Vemos valor en el largo plazo, en caso que la deuda se reestructure y se desregulen las tarifas”.


Diego Martínez Burzaco concluye: “no veo atractivos o drivers para invertir en el sector energético argentino. Las acciones argentinas, en general, remiten un alto riesgo, pero de elegir una apuesta especulativa, seguramente no lo haría ni en Pampa Energía, ni en Edenor ni en TGN”.