Peter Lynch es uno de los referentes más importantes del Value Investing (Inversiones de Valor). Está a la altura de Warren Buffett y apenas por debajo del que es considerado padre de esta disciplina de inversión: Benjamin Graham.
Dentro de la frases más contundentes, recordadas y efectivas que Peter Lynch ha manifestado fue: “Yo amo a la volatilidad en los mercados financieros”. La dijo durante un discurso en en octubre de 1994 cuando le fue preguntado si estaba preocupado por la reinante volatilidad de las bolsas y si recomendaba tomar alguna medida al respecto.
“La volatilidad te permite comprar activos financieros a precios muy por debajo de su valor”, sentenció.
Los últimos días fueron momentos de mucha volatilidad. En tan solo 3 ruedas, el índice Nasdaq retrocedió más de un 10%. Lógicamente, la suba anterior había sido fuerte, abrupta y hasta exagerada. Nos habíamos referido a esto en un artículo previo en el cual hicimos mención a la rotación del portafolio que podía emerger a futuro.
Y el índice de volatilidad, medido por la compra de cobertura de los inversores para protegerse de potenciales bajas del mercado, registró la suba semanal más grande desde junio pasado.
Esto nos lleva a monitorear de cerca los movimientos próximos, para determinar si estamos en presencia de una sana toma de utilidades o un eventual punto de inflexión en la tendencia a nivel general.
Allí surgirán nuevas oportunidades, sobre todo para aquellos que no pudieron aprovechar la suba reciente y se quedaron con una gran parte de liquidez en la cartera. Es una cuestión de paciencia y timing.
Pero el proceso decisorio, no puede estar librado al azar. Son las empresas con buenos fundamentos y proyecciones auspiciosas a futuro las que podrán seguir liderando en los mercados. Seguramente te estarás preguntando cómo podemos saber con exactitud lo que le depara a cada empresa.
Allí, tres consejos necesarios a considerar.
Un primer elemento a utilizar es, sin dudas, nuestro sentido común. Sabemos que la pandemia seguirá golpeando las expectativas en el corto plazo, aún cuando aparezca una vacuna pronto. Más allá de eso, existen cambios en el comportamiento de los individuos y empresas que prevalecerán más allá de la eventual cura contra el virus. En este caso, lo que originó la pandemia fue una aceleración de los procesos que se venían gestando previo a la Covid-19: la digitalización de la economía, la utilización de la nube como herramienta central de la actividad corporativa, la intensificación del e-commerce, entre otras cosas.
Un segundo aspecto es, desde ya, la utilización de los balances trimestrales que van presentando las empresas listadas. Esos documentos nos dan una idea acabada de la película pasada reciente a nivel empresarial, la foto presente y, además, una proyección de lo que viene. Es un contenido extremadamente valioso.
Y en tercer plano existe algo muy importante que no todos los participantes del mercado conocen o utilizan correctamente: la actividad de los insiders.
¿De qué estamos hablando?
Se denomina insiders a aquellas personas que pertenecen al management o cuerpo gerencial de una compañía pública, como ser directores, síndicos, etc., que deben informar a los organismos de control cualquier transacción particular que hagan con las acciones de la empresa en la que trabajan, se trate de una compra o una venta. En los mercados de Wall Street, el documento asociado a este tipo de transacciones que se presenta ante la Securities and Exchange Commission es el denominado Form 4.
Esta es una información muy valiosa para el inversor. Saber qué está haciendo el management de la empresa con las acciones de la misma puede marcar las expectativas que ellos tienen en cuanto al potencial futuro de los negocios de la firma. Los insiders son los agentes que poseen más información que nadie respecto a cómo evolución las actividades de la compañía y, generalmente, sus transacciones anticipan el movimiento del papel en la Bolsa.
Si los insiders están comprando acciones de la firma es porque creen que dichos activos están baratos respecto a su cotización actual, mandando una señal a los inversores. En sentido opuesto, las ventas de los insiders pueden estar anticipando que malas noticias están por venir para esa empresa.
Claro está que no es un predictor perfecto, pero funciona muy bien. Pero si no sos un inversor profesional que se dedica 100% al mercado, buscar la información del Form 4 en la página de la SCE puede resultarte muy tedioso. En este sentido, dejame aliviarte el camino con un atajo. En el sitio Open Insider vas a poder ver las últimas transacciones disponibles filtradas por empresa. Solo tenés que ingresar el ticker de la empresa en la que estás buscando invertir y, una vez realizado tu propio análisis, podrás ver qué es lo que está haciendo el management de la firma en relación a sus acciones.
Por ejemplo, este es el comportamiento reciente de los insiders en una de las empresas que está trabajando en el desarrollo de la vacuna contra el Covid: la estadounidense Moderna (MRNA).
Al parecer, tanto el CEO, el presidente como el CMO no son tan optimistas con el resultado final de la vacuna o creen que las mejores noticias por venir ya se encuentran incorporadas en el precio de la acción ¡No han parado de vender acciones de la compañía!
Con esto, no estoy diciendo que Moderna no puede seguir subiendo hacia adelante. Solo estoy interpretando la señal predicitiva que nos dan los insiders.
Más allá de este caso puntual, ya tenés disponible una nueva herramienta para mejorar tu búsqueda de acciones valiosas para u portafolio.