Acciones bancarias en los EE.UU., ¿buena opción en 2013?

Por Sala de Inversión

Si el sector de la construcción en los Estados Unidos fue la revelación de 2012, lo mejor de todo es que esta bonanza bursátil la comparte con el financiero, otro de los de mejor desempeño gracias a la recuperación de los préstamos hipotecarios y la expansión del crédito de consumo.
De acuerdo con el analista de Sala de Inversión, Andrés Cardenal, el sector financiero se posiciona en un lugar muy favorable para capitalizar la continuidad de la recuperación inmobiliaria este año, particularmente las entidades de gran tamaño.
“Bancos como Wells Fargo (WFC) o JP Morgan (JPM) tienen mayor calidad, y por tanto son más defensivos y estables. Pero por otro lado Bank of America (BAC) y Citigroup (C) al estar muy subvaluados tienen un mayor potencial de ganancias en un escenario de recuperación fuerte para el sector”, señala.
Aunque las instituciones financieras que forman parte del índice S&P 500 avanzaron un 24% en 2012, protagonizando su mayor rally en nueve años, y en términos de valuación se encaminan a alcanzar precios pre crisis 2008, en opinión del economista jefe de Inversor Global, Diego Martinez Burzaco, todavía queda mucho por hacer en términos de actividad de intermediación financiera .
“Las hojas de balances de las entidades han mejorado, pero persisten algunos problemas sin resolver y el mercado de hipotecas todavía tiene un largo camino que recorrer para regularizarse”, explica el expertoa Sala de Inversión América.
Aún en este contexto, las señales de recuperación del sector inmobiliario llevaron a las principales firmas de Wall Street a elevar estimaciones de beneficios un 32% para el cuarto trimestre, la mayor revisión entre las diez industrias del S&P 500.
“Entre las virtudes debemos destacar la sólida posición de caja (especialmente en Estados Unidos), la vuelta al pago de dividendos en efectivo y la posibilidad de iniciar programas de recompra de acciones. Entre los riesgos potenciales hay que considerar la debilidad de la economía de EE.UU., el incremento de la prima de riesgo en la Unión Europea y la exposición de los bancos a bonos de países financieramente complicados (Italia, España, Grecia) ”, señala Martínez Burzaco.
En tanto, Ariel Squeo, Director de ICB Argentina, argumentan que la recuperación del mercado financiero se produjo mucho antes, a partir de mínimos de octubre de 2011, y lo atribuye al retraso que presentaba respecto al resto del mercado, después de desplomarse un 84% en conjunto durante la crisis financiera.
“Cuando cayó el golpe fue muy fuerte y a la hora de recuperar no lo hizo cuando otros sectores lo hicieron. La subida de los últimos meses sólo ha logrado acomodarlo al resto”, destaca y explica que la mejora del negocio inmobiliario es una de las tantas variables que inciden en el desempeño de la industria financiera, pero no es la más importante. “Desde principios del cuarto trimestre de 2012 y las primeras semanas de enero las dos variables más importantes fueron el ‘Fiscal Cliff’ y la decisión del QE3 de Bernanke”, afirma.
Con la temporada de resultados pisando los talones en Wall Street, los drivers del sector a corto plazo serán los balances del cuarto trimestre fiscal, que estrena esta semana Wells Fargo, el cuarto mayor banco estadounidense.
“Habrá que ser cautos respecto a la potencialidad de las cotizaciones a la luz de la fuerte subida evidenciada. En Estados Unidos, midiendo el P/E y otros ratios de solvencia, me inclino por bancos como Wells Fargo o JP Morgan. En Europa, depende de muchos factores, pero iría a lo más seguro, como puede ser un Deutsche Bank o cualquier otro banco alemán”, comenta Martínez Burzaco.
A juzgar por los últimos resultados conocidos los bancos más sólidos fueron Wells Fargo y JP Morgan Chase con aumentos de ganancias del 22% y 34%, respectivamente. En el caso concreto de JP Morgan, los resultados dieron señales de que el banco se está recuperando del escándalo apodado “la ballena de Londres” (London Whale) que generó enormes pérdidas en una cartera de derivados de créditos de casi 6.000 millones de dólares en el primer semestre.
Pero para los que quieren invertir ‘sobre seguro’ las apuestas recaen sobre Wells Fargo. “Sin lugar a dudas es el banco de mayor calidad entre los grandes, que no cometió los excesos de otros durante la burbuja de crédito, y tiene una administración de riesgo más cautelosa que le permitió salir de la crisis mucho mejor posicionado. Hoy en día es líder en negocios como crédito hipotecario en EEUU gracias a que pudo aprovechar las ventas de activos forzadas por parte de sus competidores”, resalta Cardenal.
En tanto, el analista señala que Bank of America (BAC) y Citigroup (C) pueden tener un potencial más alto que las entidades financieras de calidad, dado que están mucho más baratos, aunque todavía estén tratando de limpiar sus balances.
Para que les vaya bien dependen en mayor medida de que el contexto económico los ayude, que de la calidad de sus activos. No obstante, hay quienes mantienen una visión más cautelosa sobre la industria atendiendo a los precios actuales.
“No tomaría una exposición fuerte en el sector financiero porque está en los niveles máximos de los últimos cinco años y de momento tampoco los está superando”, afirma Squeo, quien tampoco percibe razones para la euforia respecto a los resultados del cuarto trimestre que comienza estos días en el sector.
“La comparativa anual para el sector podría ser positiva, pero respecto al trimestre no soy muy positivo. En cuanto a las ganancias el resto del año no creo que sean favorables, teniendo en cuenta que 2013 será año de ajustes, con mayores impuestos, recortes del gasto y menos ayuda por parte de la Reserva Federal que está dejando ver que no continuará la política expansiva al mismo ritmo”, concluye.

Como fue el 2012 y qué esperar en 2013

El 2012 ya fue dejado atrás. Un año complicado, sin dudas. Pero con buenas oportunidades de hacer negocios.

La volatilidad provino de muchos frentes a saber:

– Grecia, España e Italia pusieron en jaque la Unión Europea y la supervivencia de la moneda común.

– Estados Unidos no logró salir de un “mediocre” crecimiento económico, generando más incertidumbre de cara al 2013.

– China, el motor del mundo hasta ese momento, mostró una clara desaceleración económica, tendencia que parece comenzar a revertir en el último trimestre de 2012.

– Otras grandes economías mundiales también sintieron el impacto como es el caso de Brasil e India.

A pesar de este contexto, los inversores apostaron a una recuperación global y mostraron cierto optimismo con el manejo de la crisis por parte de las compañías, Así, las acciones avanzaron casi a su mejor ritmo de los últimos tres años y el índice S&P500 finalizó el año con una suba de 12,9%.

También fue un año positivo para las apuestas especulativas que había dado a conocer el 1° de enero de 2012 (ver Mis tres apuestas especulativas para el 2012). En concreto dos de las tres recomendaciones mostraron avances que duplicaron o casi triplicaron al índice como es el caso de Yahoo! (+22,8%) y Netflix (+33,6%). Sólo Research in Motion tuvo un año negativo con una pérdida acumulada de 18,1%.

El 16 de junio de 2012, cuando repasé las apuestas especulativas (ver El repaso de mis apuestas especulativas) agregué a la lista de las anteriores a dos acciones que iban a dar que hablar en los próximos meses: Nokia y Green Mountain Coffee. Desde ese momento a la fecha Nokia subió un 59,2% y Green Mountain un 108,5%.

De estas cinco acciones, para 2013 me quedo con Netflix y RIMM, por diferentes motivos que hacen que mis expectativas se matengan favorables para estos activos. El principal motivo, que toca de cerca a ambos, es un potencial “takeover”.

El 2013 será desafiante y vibrante. Juntos compartiremos esta experiencia.

Elecciones en USA y el comportamiento del S&P500 en la transición

Mañana, martes 6 de noviembre, el mundo posará sus ojos sobre el evento político más trascendental del año y que tendrá lugar en los Estados Unidos. Se trata de las elecciones presidenciales.

De acuerdo a los últimos relevamientos, estaremos ante una de las elecciones más reñidas de los últimos tiempos entre demócratas, representados por Barack Obama, y republicanos, representados por Mitt Romney.

Desde el punto de vista inversor, me pareció interesante examinar qué pasó durante las transiciones presidenciales con el mercado, ya sea cuando hubo un cambio de mandatario o cuando hubo una reelección del mismo.

En este sentido consideré el período entre la fecha en que se celebró la elección y en la que se produjo la asunción del presidente.

Si bien los datos no son más que eso, ya que cada proceso estuvo signado por distintas características, muchas veces las estadísticas históricas son una herramienta de inversión utilizadas con mayor frecuencia de lo que podemos esperar.

El cuadro siguiente es revelador:

Las conclusiones que podemos obtener son las siguientes:
  • Considerando las últimas nueve transiciones presidenciales, en siete de ellas el S&P 500 mostró subas y en dos de ellas caídas.
  • Considerando los nueve períodos, el mercado tuvo un desempeño promedio negativo de 0,245%. Este dato está fuertemente influenciado por la caída marcada del mercado durante la transición de la llegada de Obama al poder tras la crisis inmobiliaria subprime.
  • Desde 1976 a la fecha, siempre que un mandatario fue reelecto, el mercado subió durante la transición.      
  • Cuando hubo un cambio en el partido gobernante, el mercado se comportó errático. Rendimiento neutro con la llegada de Reagan en 1981, suba con la asunción de Clinton en 1993 y caída profunda con la llegada de Obama en 2009.
Como se observa, generalmente los períodos de transición presidencial son positivos para las acciones, aunque tampoco existe una suba desmedida.

Considerando la situación económica vigente, no existirían motivos para que esta vez sea la excepción.

De todos modos, si usted nos tiene preferencia sobre un candidato en particular, un informe del banco inglés Barclays puede ayudarlo a inclinar la balanza: desde 1929, cuando los demócratas estuvieron en el poder el mercado subió un 10,8% anual en promedio, mientras que con los republicanos, el mercado subió “apenas” 2,7% anual.

Apple, lo que pasó y lo que puede pasar

La “Applemanía” está presente en todo lo relacionado con las finanzas globales y las inversiones. Desde hace poco más de 18 meses, la empresa de la manzanita comenzó a despertar pasiones entre todos los participantes del mercado, principalmente sobre inversores que hasta ese entonces no habían descubierto en su totalidad las bondades de la empresa y sus acciones.

Desde ese momento hasta la fecha han tenido lugar una cantidad de eventos insuscitados tales como el fallecimiento del fundador de este imporio tecnológico hasta la presentación de nuevos dipositivos móviles que revolucionaron el mercado como el iPhone 4s y, más recientemente, el iPhone 5.

Cuando uno hace alusión a Apple es difícil encontrar puntos flacos tanto en lo relacionado con sus cuestiones operativas como en el desenvolvimiento de sus acciones en el mercado y la consecuente alegría aportó en los portafolios de los inversores:

– En términos estrictos de mercado, las acciones de Apple acumulan una suba de 70,2% en lo que va del año.

– Para aquellos inversores que no han invertido directamente en la acción, también se vieron beneficiados en cierta medida. El índice estadounidense S&P500 acumula una suba de 16% en el año, de los cuales el 2% se lo debe enteramente a la performance de Apple, según un relevamiento del Standard & Poor’s.

– La empresa representa en la actualidad más del 4% de la capitalización bursátil del total de las 500 empresas que constituyen el índice, potenciando el efecto anterior.

– Lo interesante de Apple es que la mejora en el precio fue una consecuencia del gran salto cualitativo que mostró en términos operativos y de utilidades por acción. El siguiente gráfico es revelador al respecto:

Fuente: YCharts

A pesar de la fuerte revalorización del precio de la acción, el indicador P/E ha disminuido sistemáticamente lo que implica que la mejora bursátil fue más que proporcionalmente compensada por la suba de las ganancias por acción. Esto claramente sugiere que no nos encontramos ante una burbuja a punto de explotar.

En relación a lo operativo, las cifras son inobjetables: 

– Aún teniendo en cuenta el último trimestre, donde las ganancias quedaron “cortas” respecto las expectativas, el margen operativo se situó en 33,1%, el margen neto en 25,2% y el retorno sobre los activos (ROA) se ubicó en una tasa anualizada de 22,5%.

– El iPhone 5 superó todos los pronósticos de ventas y 2 millones de órdenes fueron cursadas en el primer día de pre-venta.

– Para el trimestre en curso, que finaliza el 30 de septiembre próximo, los pronósticos de venta de iPhone pasaron de 23 millones a 26 millones de unidades.

– Considerando las ganancias por acción del último trimestre como la nueva tendencia de largo plazo, situación que no comparto en la actualidad, su P/E forward es de 18,7x, nada sobrevalorado.

Por todo lo anterior, considero que las acciones de Apple tienen un sendero alcista para los próximos meses, considerándola una excelente oportunidad para posicionarse en los permanentes cambios tecnológicos que ya están conviviendo con nosotros.

¿Cómo actuar ante la inminente acción de la FED?

El jueves próximo, 13 de septiembre, los inversores seremos testigos de lo que podría ser el anunciado más esperado de los últimos 18 meses en términos de inversiones.
El Comité de Política Monetaria de la Reserva Federal finalizará su “ordinaria” reunión de dos días y todos estarán expectantes de lo que dirá el comunicado final, previo a la conferencia de prensa de Ben Bernanke.

Considerando que el mercado laboral estadounidense sigue muy debilitado – el viernes pasado se informó que en agosto se crearon tan sólo 96 mil puestos laboral contra los 125 mil esperados – y que la confianza en la economía también muestra fragilidad, el mercado considera como inminente un anuncio de incentivo monetario por parte de la autoridad monetaria.
Primero fue el turno del Banco Central Europeo, con su recompra de bonos, luego de China, con el anuncio de un plan de infraestructura por US$ 156 mil millones (aunque se esperan nuevas medidas): ¿ahora será el turno de la FED?
La idea de este nota es tratar de descifrar qué es lo que vendrá para el mercado en el hipótetico caso de que Bernanke finalmente materialice su plan de estímulo, denominado QE3, el jueves próximo.
Entre líneas, muchos analistas consideran que el incentivo tendrá dos pilares fundamentales: una reducción de la tasa de redescuentos, para incentivar a los bancos comerciales a que los fondos que depositan en la FED sean reasignados a préstamos al consumo y la producción, y un nuevo monto destinado a la recompra de bonos en el mercado secundario por un total de hasta US$ 600 mil millones para inyectar liquidez adicional.
A juzgar por lo que pasó en los planes anteriores, el mercado podría presentar cierta bonanza para las semanas posteriores al programa:
                                                                                                                            Fuente: Stock Twits
De todas formas, existen opiniones encontradas sobre el éxito o no del plan de la FED y su posterior efecto en el mercado de acciones.
Entre los “contrarians”, están los que señalan que cualquier efecto positivo del accionar de la entidad que comanda Bernanke ya se encuentra reflejado en los precios de las acciones, cuyos índices alcanzaron los valores máximos en cuatro años. Además, el plan final podría quedar corto respecto a las expectativas o no traccionar sobre la economía estadounidense considerando que los anteriores QE (quantitative easing) no han logrado ese cometido.
Entre los optimistas, encontramos a aquellos que depositan sus esperanzas en el hecho de que la FED será más original que en las últimas oportunidades y sorprenderá positivamente con las medidas a tomar. Adicionalmente, las empresas globales se encuentran en una sólida posición, sin apalancamiento y con tasas de crecimiento de sus ventas que superan en muchos casos los dos dígitos, mostrando que, aún en el actual contexto de incertidumbre, hay un saludable proceso de expansión corporativa.
Muchos bancos de inversión han revisado al alza su proyección de cierre anual de los niveles de los índices estadounidenses, lo que sugiere que los grandes inversores institucionales apuestan a una suba de los mercados. Prueba de lo anterior es que los hedge funds han abierto la mayor cantidad de contratos de futuros y opciones en el mercado de commodities de los últimos 18 meses.
Las cartas están sobre la mesa, la FED está mezclando la baraja y el jueves tendremos un veredicto final que dirimirá la batalla entre “toros” y “osos”.
Mi sensación particular es que tendremos un elevado nivel de volatilidad en el corto plazo para luego continuar con la tendencia alcista del mercado accionario. 

Telefónica de España, ¿riesgo u oportunidad?

Los ánimos de los inversores se siguen exacerbando contra España y la situación empeora significativamente a paso acelerado.
El viernes último, cuando los líderes de la Unión Europea aprobaron definitivamente, aunque con algunos condicionamientos, el salvataje a los bancos españoles por un monto de 100 mil millones de euros, los presagios negativos contra el país ibérico volvieron a hacerse presente.
El IBEX de Madrid cayó 5,8%, la tasa de rendimiento del bono español a 10 años saltó por encima del 7% y el riesgo país superó los 600 puntos básicos, alcanzando un nuevo récord histórico.

Es evidente que los mercados y los analistas están perdiendo la paciencia con España, la Unión Europea y el futuro del euro como moneda común.

¿Es usted un inversor más del promedio o está en situación de tomar riesgos para multiplicar su dinero?

Telefónica de España, ¿una alternativa?
Si usted se considera se encuentra en la segunda parte de la pregunta realizada anteriormente, quizás sea el momento que empiece a prestar atención en la empresa de telecomunicaciones más importantes de España y con fuerte influencia en Latinoamérica.
La acción de Telefónica de España (NYSE: TEF). Esta acción ha mostrado una caída de 8,5% el viernes último, aunque esto es parte de un proceso declinante que se inició en mayo de 2011, momento a partir del cual la acción acumula una caída de 58,3%.
La acción pasó de cotizar en US$ 27 el ADR a los US$ 11,24 actuales. En ese período, Telefónica perdió US$ 70 mi millones de capitalización bursátil, pasando de los US$ 120,6 mil millones a los US$ 50,3 mil millones actuales.
La pregunta que debemos hacernos es si esto es coherente con los fundamentos económicos de la empresa.
En virtud de la diversificación de sus ingresos parecería que no. Latinomérica representa hoy casi el 50% de los ingresos por venta totales de la firma, tal como se observa en el cuadro siguiente:
Fuente: Telefefónica de España
En términos de resultados operativos, Latinoamérica aporta hoy un 52,1% del total del grupo, mientras que absorbe un 53% del total de las inversiones.
Si bien la tasa de expansión del negocio en esta región se ha desacelerado en el último trimestre como consecuencia de la crisis global, Latinoamérica ha ganado participación relativa respecto sus mercados europeos (España y Gran Bretaña).
En cierto sentido, la mitad de la estructura del negocio de Telefónica se encuentra ajena, no solo a la crisis española sino a la crisis europea. 
Con una relación precio-ganancia (P/E) de 9,1x y un dividend yield que se encuentra en torno al 12%, Telefónica de España se presenta como uno de las oportunidades de alto riesgo dentro del mercado español que puede sorprender gratamente en caso de que la situación tienda a estabilizarse.
¿Cuáles son las amenazas a considerar?
  • Profundización de la crisi en España e impacto negativo sobre la continuidad de la Unión Europea
  • Brusca desaceleración del crecimiento en Latinoamérica
  • Cambio de reglas jurídicas en dicha región, con medidas expropiatorias en el máximo extremo
Para los amantes del riesgo, incorporen en su radar a Telefónica y estén atentos a la presentación de su balance el próximo 26 de julio.

Mercados, ¿cuál está barato, cuál está caro?

Continúan los tiempos turbulentos y difíciles en los mercados financieros. La volatilidad no cede, el nerviosismo tampoco y lo inversores se encuentran desconcertados, confundidos.
Con las grandes bajas acumuladas en una amplia gama de mercados bursátiles, todo parece ser una “gran oportunidad” de compra, con valuaciones atractivas que no pueden dejarse pasar para quienes apuestan a inversiones de largo plazo.
Esta última afrimación es parcialmente verdadera. Por un lado, es cierto que muchos activos financieros han sido fuertemente castigados aún cuando sus fundamentos económicos permanecen sólidos, por lo que serían las “perlitas” a detectar. Por el otro, muchas activos que han sufrido un profundo sell-off continúan con sus debilidades permanecen intactas y podrían seguir con su tendencia bajista.
Con la economía estadounidense creciendo a un ritmo anualizado por debajo del 2%, con la Unión Europea decidiendo su continuidad en las próximas semanas y con las economías emergentes en constante desaceleración, no es irracional que los inversores alimenten sus perspectivas negativas para la segunda mitad del año.
¿Será realmente así? ¿Habrá lugar para distinguir entre activos de buena calidad y los denominados “basura”? ¿Estamos en condiciones de tomar riesgos adicionales?
Algunos números que pueden ayudar a tomar decisiones…

Sin duda durante las actuales turbulencias los activos estadounideses han actuado como gran refugio para las inversiones, no solo en lo referente al dólar per sé o los bonos del Tesoro de ese país, sino también en lo que se refiere al mercado accionario.

Tras un año 2011 poco alentador para la renta variable, los mercados de acciones de Wall Street concluyeron con rendimientos prácticamente “flat” en contraste con las fuertes caídas evidenciadas en otros mercados.

En lo que va del 2012, la historia parece repetirse. Mientras que el S&P 500 gana 4,96% y el Nasdaq 9,55%, el FTSE de Inglaterra retrocede 7,9%, el IBEX español 23,1% y el Bovespa brasilero 5,1%.

La gran incógnita a develar es si esta situación se puede extrapolar para el próximo semestre o si el premio que ofrecen algunos mercados es extraordinariamente elevado como para comenzar a tomar riesgos.

Una aproximación a lo anterior nos puede dar el indicador P/E. Las acciones estadounidenses cotizan con un P/E promedio de 14x, lo que significa un 19% más que sus pares europeas y un 25% más que los mercados BRIC (Brasil, Rusia, India y China).

Esto nos deja como enseñanza que los inversores globales están dispuestos a pagar un premio en las acciones estadounidenses por sobre las europeas y emergentes con tal de descansar sobre la “tranquilidad”. ¿Hasta cuando estarán dispuestos a pagar este sobreprecio?

Veamos el siguiente cuadro:


Considerando la información en el cuadro adjunto, surgen algunas cuestiones reveladoras:
  • Dentro de los mercados desarrollados, el mercado de Dinamarca y el de Suiza son los que más caros se presentan, con ratios P/E 17,7x y 15,9x respectivamente.
  • En el contexto de mercados emergentes, pero con un grado de desarrollo importante, Filipinas y Chile son los más sobrevaluados, con un P/E de 19,3x y 17,8x.
  • Finalmente, dentro de los mercados emergentes los de Malasia, Taiwán y Perú son los que mayor valores de P/E presentan.  
¿Cuáles son los mercados más “baratos” medidos por su relación precio / ganancia?
 
Rusia, Venezuela y Argentina.  
 
No podría llamarnos la atención esto último, debido al gran riesgo polìtico inherente en estos mercados y la inestabilidad creciente en economías fuertemente intervenidas por el Gobierno de turno.
 
¿Será el momento, entonces, de cerrar los ojos y apostar un pleno en estos mercados? 
 
El tiempo dará su verdicto…
 

El repaso a mis apuestas especulativas

El 1° de enero publiqué en este sitio un artículo que se denominaba Mis tres apuestas especulativas para el 2012, las cuales se trataban de acciones que habían sido fuertemente golpeadas durante el 2011 y que, debido a su “pequeña” valuación de mercado, podían ser objeto de un “takeover” por parte de otras empresas.

Las tres acciones en cuestión eran Yahoo! (YHOO), Research in Motion (RIMM) y Netflix (NFLX), tres empresas que operan en sectores diferentes, con trayectorias relativamente distintas, pero con similitudes en lo respectivo a su posicionamiento de mercado dentro de cada uno de sus rubros.

Pasado prácticamente la mitad del año, el cual ha sido realmente muy dificultoso para los inversores a raíz de los múltiples frentes de combate abiertos alrededor del mundo, echemos un vistazo a ver cómo se han comportado estas tres apuestas.

En líneas generales, lo que podemos argumentar es que estás compañías han acompañado en cierta medida el ciclo de los mercados, aunque, debido a sus propias características, sus comportamientos han sido mucho más volátiles.

A excepción de Yahoo, tanto RIMM como Netflix han acompañado la tendencia alcista del primer trimestre con ganancias acumuladas de hasta 20% y 80% respectivamente, situación que permitió al inversor que ha tenido un buen timing disfrutar de ganancias poco despreciables en muy corto plazo.

Con la baja de los mercados, tras el agudizamiento de la crisis europea, las tres recomendaciones rápidamente retrotrajeron sus buenas performances y hoy se encuentran nuevamente en zona negativa, siendo la productora de Blackberry la más golpeada hasta el momento.


¿Cuál es mi postura para el segundo semestre respecto esta tres apuestas?

No ha variado. Sigo creyendo que cada una de las tres empresas tiene un atractivo para que inversores o grandes empresas se fijen en ellas.

Brevemente:
  • Yahoo! se desprendió de su unidad Alibabá, al tiempo que firmó un convenio con CNBC para enriquecer su sitio de Finanzas. Mejora la posición de liquidez y agrega lazos comerciales con empresas de mucha reputación. En el lado negativo, sigue perdiendo terreno frente a Google y Bing (buscador de Microsoft).
  • Reserach in Motion dejó definitivamente de lado la lucha por mayor participación de mercado con Apple y Samsung, situación que le es favorable para que se focalice en mercados emergentes con fuerte potencial, entre ellos India y Brasil.
  • Netflix ha desembarcado en el Reino Unido, mientras que el control y la penalización a sitio de streaming ilegales en Latinoamérica y los Estados Unidos le abre una puerta para posicionar su negocio en esos mercados.

Nunca debemos olvidar que son posiciones meramente especulativas y que por eso debemos considerar exponer un muy bajo porcentaje del portafolio a estas jugadas (no mayor al 5% del total).


Veremos como transcurren los acontecimientos en la segunda mitad del año.

PD: Para aquellos muy osados y amantes del riesgo, no se pierdan Nokia (NOK) y Green Mountain Coffee (GMCR), activos que prometen no pasar desapercibidos en los próximos meses.

Razones para ser optimistas con el mercado

Las razones para ser pesismistas respecto a los mercados bursátiles de cara al segundo semestre son muy reconocidas entre todos los inversores. Algunas de ellas:
– Efecto Grexit, que implica la salida de Grecia de la zona euro y su consecuente impacto sobre la credibilidad del bloque económico.
– España y su posible “bailout” ante el deterioro acelerado de su economía y sus indicadores de riesgo.
– Ralentización de la actividad económica estadounidense y el efecto “incertidumbre” con relación a las elecciones presidenciales cercanas.
– La desaceleración de China, que en los últimos años ha sido el motor principal de la economía global.
– La guerra de las monedas: la búsqueda de competitivdad lleva a una guerra devaluatoria entre las principales monedas globales.
A pesar de lo anterior, sin embargo, hay una razón para ser optimista. La psicología y el estado de ánimo de los inversores nos dice mucho al respecto y, para confirmar lo anterior, veamos los siguientes dos gráficos:
Si tomamos el índice de medición del “miedo-codicia de los inversores” podemos sacar la conclusión de que en los últimos tres años, cuando el nivel de miedo alcanzó un máximo (medidados de 2010 y 2011), los mercados han recuperado fuerte en base a noticias más auspiciosas y a compras de oportunidad tras los deprimidos precios de los activos.
En mayo de 2012 la situación se vuelve a repetir, por lo menos en lo respectivo al “miedo”. ¿Será el momento de ir considerando rearmar posiciones en el portafolio para buscar un rally alcista en el segundo semestre?.

¿Podrán los inversores argentinos comprar acciones de Facebook?

Nota realizada por el Cronista Comercial (con mi participación)

Que buena parte del planeta ya tenga su propia cuenta de Facebook, a esta altura, no es novedad. Tampoco que la poderosa compañía liderada por Mark Zuckerberg haya decidido salir al Nasdaq Composite, índice donde cotiza la mayoría de las empresas de tecnología e internet, para incrementar (aún más) su importante capital.

Lo que sí resulta una novedad para muchos son los requisitos que un inversor local debería reunir para intentar participar de la IPO.

“Hay que pensar que la expectativa es grande en todo el mundo. Pero la cantidad de acciones disponibles serán absorbidas seguramente por los inversores institucionales más importantes de Estados Unidos y del mundo”, remarcó Diego Martínez Burzaco, economista jefe de Inversor Global.  Y agregó, “si es difícil para el inversor minorista norteamericano, mucho más lo es para un argentino”.

Para poder tener una mínima esperanza de acceder a acciones de Facebook, el inversor argentino debería contar ya con una cuenta en el mercado americano.

“La otra posibilidad sería a través de algún broker local, pero en ese caso sería a partir de la cuenta propia del broker. La otra chance sería si circunstancialmente Facebook lance el cedear para ingresar en el portfolio minorista”, detalló Martínez Burzaco.

La otra chance para los accionistas argentinos sería que Facebook deje acciones disponibles cuando salga a cotizar. De todos modos, sólo podrían hacerlo aquellas personas que ya tienen una cuenta propia en los Estados Unidos.

“Consultas para entrar en Facebook o cómo hacer para ingresar hay y nos llegan todos los días más. Es la verdad. Todos quieren participar pero será una operación muy difícil. Todos quieren formar parte porque recuerdan lo que pasó con LinkedIn que, en el primer día que salió a la bolsa, subió más del 100%”, destacó.

Jorge Compagnucci, analista de Fénix Report, también dio su visión respecto a las trabas que contarán los inversores locales a la hora de participar de este negocio. “Básicamente los que adquieran acciones en la oferta inicial serán fondos que están obligados a ampliar el abanico de riesgo. Que hoy Facebook salga, para muchos inversores locales no es una buena noticia porque es señal de que estamos próximos a una gran corrección”, dijo.

¿Cuáles son los requisitos?

En primer lugar, el operador local debe abrir una cuenta en los Estados Unidos y, luego operar a través de un brooker, un agente de bolsa en Argentina autorizado.

Actualmente, en hay agentes de bolsa que ’tercerizan’ las operaciones afuera. Pero en cierta manera, en estos casos, no es una operación con todas las disponibilidades legales porque las acciones de compra venta se realizarían a través de un subcuenta que tiene el agente de bolsa en el exterior.

Algunos analistas locales coinciden, por ejemplo, que Argentina no desarrolló jamás un volumen de negocios importante porque muchos de los brokers que operaban en Argentina se fueron a los Estados Unidos.

Pero también existen otras opciones. El inversor común puede invertir en Wall Street mediante una terminal que se descarga por internet y puede hasta ejecutar una orden desde su hogar. El inconveniente es que se supone que ya no se pueden abrir, porque desde hace más de dos años no se pueden realizar envíos de dinero al exterior.

Una forma para poder enviar dinero al exterior es mediante la liquidación de dólares a través de la operatoria del contado con liquidación.

“El inversor compra títulos en dólares y los vende en el exterior. Una vez allí, a las 72 horas pasa a contar con el dinero en dólares y puede operar”, detalló otro operador que prefirió no ser nombrado.

Otras posibilidades

Algunos inversores locales deciden abrir una cuenta en los Estados Unidos mediante sitios de Internet (como, por ejemplo, Ameritrade).

En ese estilo de sitios, se pide al interesado que complete un formulario con su perfil (una especie de incorporación en la cual el inversor debe demostrar conocimiento de lo que está solicitando) y al tiempo, una vez ya enviada la solicitud, la firma envía al interesado un mail de acceso.